Llanto a la soledad de mi alma. No dejo de pensar en ti, anidas en mi mente Aferrada en lo profundo de mi alma. Soy un loco que no vive en el presente, Anclado en un tortuoso pasado, Porque tu olor aún sigue en mi cama. Fuiste ese pequeño remanso de paz Que alimentaba un espíritu condenado A verse envuelto en un paño de soledad Quemando las entrañas de un amor Que con el tiempo fue olvidado... Lo que mi alma no era capaz de curar Tus besos cicatrizaban mis heridas, Fuiste la que mostró el significado de amar, Mientras mi alma vagaba por aquel lúgubre y triste Caminar. Y ahora que te has ido, Mi alma llora sin consuelo Muerta Quizás, por saber que te ha perdido O por la angustia de pensar De que nunca te haya tenido. Sergio Jesús Villar Santirso.
Poeta en vida y verso en muerte.
Me alegra que sigas cultivando tu talento. Siempre creativo e intenso, derramando dolor y agitando las más profundas emociones a todas las almas que han pasado por tu vida. ¡Bravo, Sergio!
ResponderEliminar